Tuesday, January 26, 2010

Mi Mal pronostico

“Me equivoque, cualquiera se equivoca…”, dice el estribillo de una popular canción cubana. Sí, porque la semana pasada profesé que Jaromil, el personaje de la novela de Milan Kundera “La vida está en otra parte”, terminaría ceñido por la poesía para salvarse él y a su propio país. Su suerte, sin embargo, fue la continuidad, hasta la muerte, con los dogmas en los que creyó. Al menos es válido morir defendiendo lo que se ha creído durante toda la vida. Mi optimismo lo vi frustrado al llegar al final donde el joven poeta decidió morir buscando la gloria apegado a la creencia de un futuro mejor. Ahora bien, el propio Kundera me justificó “Todas las previsiones se equivocan, es una de las escasas certezas de que disponen los seres humanos”.
De inmediato puse en mis manos otro de los libros que esperaba su turno. Como le prometí es del mismo autor. Se titula La Ignorancia y fue publicado en francés, algo que molesta al lector checo, porque Kundera sus últimas obras literaria las ha escrito en el idioma del país que lo acoge hace varios años.
Aquí la historia me toca de cerca. El exilio y el contraste cultural. La ausencia de seres querido por ideas políticas y doctrinas ideológicas. La vida del inmigrante con sus lados buenos y oscuros. Los familiares que quedan atrás, los amigos, la comida, la música… los que se mueren sin poder tan siquiera llorarlos (…) y la patria, como un todo, con sus simboles marchitos por la afrenta.
El regreso, un anhelo permanente del exiliado, cuando ya el socialismo resquebrajó sus muros, es un desafío inesperado. Todo ha cambiado, mejor dicho, todo lo han cambiado por otras dimensiones menos humanas. Aquellas huellas hablan por sí sola de la arrogancia vacía y del fracaso de los promotores de un futuro mejor. En cada una de las escenas veo las mismas imágenes de cualquier cubano en la diáspora porque los exilios involuntarios son también tragedias.

1 comment:

  1. Si, las huellas son profundas y el futuro mejor no esta asegurado, como se puede ver en varios paises postcomunistas, pero por alli vamos...
    Ache pa los cubanos!

    ReplyDelete